Espiritualidad


     Vivimos una espiritualidad “siempre antigua y siempre nueva”, inspirada en:

1. La vida monástica de San Agustín de Hipona (inquietud-búsqueda, interioridad-trascendencia, amistad-comunidad, otium sanctum (caritas veritatis)-negotium iustum (necessitas caritatis).


“El amor a la verdad busca el ocio santo; la necesidad de la caridad acepta el negocio justo. Si nadie nos impone esta tarea, debemos dedicarnos a la búsqueda y contemplación de la verdad. Pero si se nos impone, debemos aceptarla por necesidad de la caridad. Pero ni siquiera en este caso debemos abandonar el deleite de la verdad, no sea que privados de su deleite,  nos oprima la necesidad” (S. Agustín, De Op. monach. 29, 37; PL 40, 576).

2.   La herencia contemplativa de la Sierva de Dios Madre Albertina Ramírez Martínez: ora, labora et passio  (orar y trabajar desde la dimensión de la cruz).

“Quiero ser una cruz viviente, una crucificada viviente, una crucifixión viviente por tu amor” (M. Albertina).

“Os adoro, Señor, desde el abismo de mi nada” (M. Albertina).

Ø San Agustín es Nuestro Padre, porque  nuestro fundador se formó a sus pies.
Ø Madre Albertina es Nuestra Madre, por ser la primera contemplativa nicaragüense de la que tenemos noticia y porque la honramos llevando su nombre: Monjes Contemplativos Albertinianos. 

·        Vivimos una espiritualidad centrada en el seguimiento de Jesús.

    ORA: Eucaristía, Sagrada Liturgia (el gregoriano es nuestro canto), Lectio Divina (fuente de la teología monástica), silencio contemplativo (para estar a la escucha del Maestro Interior), oración personal (para estar con Él…), Liturgia de las Horas (para santificar el tiempo, para orar por los que no oran y para orar en comunión con toda la Iglesia), soledad habitada por la Trinidad Santa de Dios, Confessio- Diario Espiritual (la memoria espiritual del monje).
   
    LABORA: Nuestra ilimitada confianza en la Divina Providencia (M. Albertina) y el trabajo de nuestras manos (S. Agustín). Ejercemos el apostolado teológico en un monasterio urbano y culto (S. Agustín).

     PASSIO: Desde la dimensión de la cruz (M. Albertina).